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afrol News, 15.01.2003 - La subida de tarifas en Cabo Verde sigua provocando protestas en todos los sectores. Ahora el turno es el de las empresas. A través de una conferencia de prensa, la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Sotavento se ha pronunciado para afirmar que los establecidos aumentos de las tarifas de agua y energía a partir del 1 de enero van a empeorar las ya malas condiciones de las empresas en las islas caboverdianas. Orlando Mascarehnas, Presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Sotavento (CCISS) fue claro durante la rueda de prensa concedida a los medios, afirmando que las condiciones de trabajo de las empresas caboverdianas ya son lo suficientemente precarias como para aguantar las nuevas subidas de agua y energía. Mascarehnas fue aún más allá al predecir que, con estas medidas, "difícilmente será el 2003 el año del relanzamiento de la economía nacional", en referencia al impacto que los nuevos precios tendrán en la vida empresarial de Cabo Verde. El motivo de la conferencia de prensa era el de hacer públicos los resultados de un estudio realizado por la CCIISS sobre las consecuencias y el impacto que tendrán las subidas de las mencionadas tarifas, después de "haber sido puestas por el gobierno mediante una medida de hechos consumados". Según Mascarenhas, el gobierno "debería haber informado previamente a las entidades patronales". Las familias, explicó Mascarehnas, serán al mismo tiempo las grandes afectadas, si se piensa en los previsibles y anunciados aumentos de los combustibles, junto con nuevos aumentos en las tarifas de agua y energía. "Todo ello apunta hacia una recesión", concluyó. - "Los aumentos generalizados desde comienzos del mes de enero dejan a las familias mucho menos dinero para gastar. Las empresas tienen que vender más caro y vender menos, ya que el consumidor tiene menos dinero para gastos no vitales", explicó. Mascarehnas adelantó que las cámaras de comercio caboverdianas van a
solicitar al gobierno iniciar un diálogo para que se definan políticas
para el sector de la energía, así como para definir los mecanismos de
regulación necesarios para que se puedan evitar situaciones como la que se
vive ahora en un futuro próximo.
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