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afrol News, 28.05.2002 - El gobierno de Costa de Marfil ha anunciado rápidas reformas de descentralización que se implantarán el próximo año. El Primer Ministro Pascal Affi N'Guessan ha anunciado hoy que se crearán nuevas entidades locales y el número de regiones del país descenderá de las actuales 19 a tan sólo 10. De acuerdo con el diario gubernamental, 'Fraternité Matin', el Primer Ministro N'Guessan anunció ayer la implantación de un tipo totalmente nuevo de administración local, que se denominarán juntas. Las juntas generales tendrán una función de cooperación, en estrecho contacto con la población local, dijo N'Guessan. La reducción de 19 a 10 regiones era necesaria para asegurar que las nuevas juntas generales tendrán el poder suficiente y estar, al mismo tiempo, más cercanas a la población. Después de todo, el principal objetivo de la reforma es poder ofrecer un mejor servicio a los beneficiarios. La extensión geográfica de las juntas vendrá determinada por el factor de la población, según las condiciones establecidas por el gobierno. Las nuevas entidades serán más independientes en lo que se refiere a los términos económicos y, por lo tanto, más dependientes de su propia población. N'Guessan anunció que las juntas generales tendrán la responsabilidad del buen desarrollo de los asuntos socio-culturales de su población y que disfrutarán de mucha más autonomía. El proceso de descentralización en Costa de Marfil es parte de las ya desarrolladas reformas de gobierno comenzadas como resultado de la estrecha cooperación del país con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El gobierno de Costa de Marfil ya había llegado al acuerdo este año de desarrollar los conceptos de descentralización en su comunicación con el FMI. La descentralización no es, sin embargo, ningún ejercicio nuevo en Costa de Marfil. Se trata, quizás, del país de la francofonía que más tradición ha tenido en esta materia. La primera legislación sobre descentralización fue ya implantada en 1977. En 1990, todas las comunidades tenían representantes y un variado grado de autonomía. Las comunidades de Costa de Marfil tienen ya una variedad de responsabilidades administrativas, como el mantenimiento de registros civiles, seguridad pública, infraestructuras educativas y urbanas. Sus poderes para crear nuevos servicios son todavía limitados, con unos fondos que provienen exclusivamente del estado.
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